jueves, 17 de enero de 2013

-A ti si te lo puedo decir, mi hermana estaría ya toda la noche pensativa y no quiero amargarle su gran día
-pues vamos dímelo, me tienes en ascuas
A Luci se le nublaron los ojos de lágrimas contenidas
- Es que ahora me quedo sola, vosotras vais a seguir estando juntas pero yo...
-¿y tus hermanos? tú te llevas muy bien con ellos, sobretodo con Antonio
- No es lo mismo, nosotras tenemos un filing especial, ellos son chicos y no es lo mismo para hablar de ciertos temas
- Anda ven vamos a bailar, no nos vamos a Rusia, Córdoba esta muy cerca deja de quejarte
A María le costo trabajo convencer a su prima, pero al fin consiguió arrastrarla al centro del salón donde estaban todos bailando, al momento la sacó un chico a bailar, Luci accedió y ya no se separaron en casi toda la velada, se la veía conversar con el animadamente, por lo que su hermana y su prima dejaron de preocuparse por ella, ya bien entrada la madrugada, las dos parejas decidieron marcharse para su nuevo domicilio, por lo que Pedro, padre de Andrea, decidió dar por concluida la fiesta, se despidieron y emprendieron viaje a Córdoba.
Al día siguiente las dos parejas habían quedado para ir a visitar varios monumentos, aun con el cansancio de la noche anterior, no desistieron y ellos de perfectos anfitriones fueron enseñando a sus mujeres; La Mezquita, EL Alcázar, el Museo de Julio Romero y la Plaza de las Tendillas, ellas iban admirándolo todo casi boquiabiertas en múltiples ocasiones habían estado en Córdoba, pero no como turistas, todo les parecía precioso pero el cansancio ya iba siendo demasiado notable, por lo que regresaron a casa para al día siguiente seguir con su nueva ruta. Así siguieron durante toda la semana, después ya solo lo hacían los fines de semana y al mes mas o menos las dos primas estaban ya echando de menos ver a su familia y su pueblo, ellos ya se habían incorporado de nuevo al trabajo y ellas al terminar las tareas domesticas se reunían en casa de una o de otra a charlar y coser ya que Andrea tenía unas manos primorosas para la costura.
 María sorprendió un día a su prima diciéndole que estaba en estado de buena esperanza

- Andrea, Andreaaaaa
-¿ Que te pasa María? a ver dime a que vienen esos gritos
- La "señora roja" no vino este mes, ¿te das cuenta? ¡no vinooooo!
Se abrazaron saltando de alegría, estaban eufóricas
- Se lo diré a Paco en cuanto venga, le hace tanta ilusión que tengamos un hijo...
- tranquilizate y no le digas nada todavía, antes hazte las pruebas a lo mejor se puede tratar de un retraso y después se desilusionaría, mañana iremos al médico ¿quieres?
- es verdad tienes toda la razón, antes debo asegurarme
Al día siguiente les faltó tiempo, se confirmó lo que ya sospechaban, estaba en cinta... Andrea era casi tan feliz como su prima, ella también anhelaba tener un bebe, pero aun no había  llegado su hora.
 Al llegar Paco a casa, María salto a sus brazos
- seremos papás, seremos papás
Paco estaba rebosando felicidad y mas de ver a su mujer dar saltos d alegría, la beso en la cara en el pelo, el el cuello... ella se alzaba de puntillas y le correspondía, en ese momento llegó Andrea con Germinal, su marido, al enterarse había querido cruzar a felicitar a su amigo
- vaya cuadro ja ja ja
- serás inoportuno, le dijo bromeando Paco
- ya tendréis tiempo, si ya se ve que no lo perdéis ja ja ja
Al volver a su casa, Andrea iba seria, triste, Germinal le cogió la barbilla y levanto su cara, mirándola a los ojos le pregunto que le pasaba, aunque el ya creía saber el motivo de su pesar.
-nada, no es nada...
-si es algo Andrea, a mi no pretendas engañarme, te conozco
-si lo que estoy es muy feliz porque María ya va a ser madre
-¿pero?
- bueno algo de razón tienes, hay un pero, es que yo también quería darte un hijo
-tampoco hay prisa cariño, ya vendrá, ahora disfrutemos de nuestro amor. Besándola con pasión la llevo hasta la cama y esa noche hicieron el amor ...



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